VPN son las iniciales de "Red Privada Virtual" y especifica la manera en la que es posible establecer una conexión de red de forma segura. Con una VPN todo nuestro tráfico de red queda cifrado y nuestra identidad en línea se disfraza, ocultando nuestra procedencia física real. Esto hace que sea más difícil para terceros rastrear nuestras actividades y robarnos datos mientras navegamos por internet. Esto incluye la protección al conectarnos a redes WiFi públicas, las conexiones remotas a nuestro Despacho Profesional y todo nuestro tráfico en internet.

¿Cómo funciona una VPN?

La dirección IP es un número que identifica de forma única a un host (es decir, a un ordenador u otro dispositivo informático, como un servidor, un router, una impresora, etc.), que esté conectado en una red TCP/IP (como por ejemplo, Internet).

Una VPN lo que hace es ocultar nuestra dirección IP redirigiéndola a través de un servidor remoto especialmente configurado. Esto significa que si navegamos en línea con una VPN, el servidor VPN se convierte en la fuente de nuestros datos, y por lo tanto, ni nuestro proveedor de servicios de Internet (ISP), ni otros terceros podrán ver qué sitios web visitamos o qué datos enviamos o recibimos mientras estemos conectados. Realmente, una VPN crea un túnel privado por el que accedemos a la red, de forma que ni los piratas informáticos, ni nuestro Proveedor de Servicios de Internet (ISP), ni ningún estamento de control, (un gobierno, por ejemplo), puedan ver lo que estamos haciendo.

¿Cuáles son los beneficios de una conexión VPN?

Una conexión VPN “disfraza” el tráfico de nuestros datos en línea y lo protege del acceso externo. En una conexión a red convencional, los datos no van cifrados, y pueden ser vistos por cualquier persona que tenga acceso a la red y quiera verlos. Con una VPN, nadie puede descifrar estos datos.

Básicamente, la VPN nos proporciona estas ventajas:

Cifrado seguro de nuestras comunicaciones

Para leer los datos cifrados, se necesita una clave, sin la cual, un ordenador haciendo cálculos, tardaría millones de años en descifrar el código en caso de que realizase un ataque de fuerza bruta. Con la ayuda de una VPN, nuestras actividades en línea permanecerán encriptadas incluso en redes públicas. También puedes utilizar un túnel seguro para conectar de forma remota con tu despacho profesional.

Ocultar nuestro paradero

Los servidores VPN esencialmente actúan como nuestros servidores proxy en Internet (que son a los que nos conectamos para tener acceso a la red). Gracias a la VPN, los datos de nuestra ubicación geográfica están camuflados y aparentan provenir de un servidor situado en otro país o en otra localización, y por lo tanto no es posible determinar nuestra ubicación real. Además, la mayoría de los servicios de VPN no almacenan registros de sus actividades. Y aunque hay algunos proveedores VPN que sí registran nuestro comportamiento, no transmiten esta información a terceros. Esto significa que cualquier registro potencial de nuestro comportamiento como usuarios de la red, permanece oculto de forma permanente.

Acceso a contenido regional o local

Hay algunos servicios y sitios web a los que solo se puede acceder desde ciertas partes del mundo, estando restringidas al resto. A esos servicios y sitios web y a sus contenidos, se les conoce como contenido web regional o local. Una de las razones más populares para usar una VPN en el hogar es acceder a algunos de estos contenidos, que no suelen estar disponibles desde alguno de los países por los que estemos viajando. Si realizamos una conexión estándar (no VPN) para acceder a un servicio o sitio web regional, los servidores a los que intentamos acceder van a detectar que nuestra ubicación no corresponde a su región, y van a denegar nuestro acceso. De la misma forma, si nos encontramos en algunas de estas regiones de acceso restringido, no podremos acceder al contenido de nuestra propia web, en nuestro hogar.

Pero si nos conectamos a través de una VPN, ésta realiza la suplantación de ubicación, pudiendo cambiar a un servidor de ese país y apareceríamos situados dentro de dicha región, permitiéndose nuestro acceso.

Por la misma razón, las VPN también son excelentes para obtener acceso a mejores ofertas de compras en línea, billetes de avión más baratos, etc., básicamente porque los precios a menudo cambian según la ubicación desde la que se hace la compra. En resumen, una VPN puede brindarnos una dirección IP en un país diferente para que podamos acceder a nuestros sitios y contenidos habituales, incluso mientras viajamos.

Transferencia segura de los datos

Si trabajamos de forma remota, es posible que necesitemos acceder a archivos importantes (es decir, con información sensible) en la red de nuestra empresa. Por razones de seguridad, este tipo de información requiere una conexión segura. Para obtener acceso a la red, a menudo la mejor opción es hacerlo a través de una conexión VPN, ya que los servicios VPN se conectan a servidores privados y utilizan métodos de encriptación para reducir el riesgo de que nuestra información sea vulnerable a una posible captación de la misma.

En este sentido, una VPN puede agregar una capa adicional de cifrado a nuestras operaciones de banca en línea, de forma que nadie más puede acceder a nuestros datos; ni nuestro proveedor de internet (ISP), ni nuestro propio banco, y ni siquiera y especialmente, los piratas informáticos. Se obtiene así un cifrado avanzado, así como una eficaz protección hermética contra las amenazas en línea más comunes, por lo que nuestros datos siempre se mantienen seguros y protegidos.

En resumen

Una conexión VPN establece una conexión segura entre nosotros e Internet, y todo el tráfico de datos que generamos, se enruta a través de un túnel virtual encriptado. Esto camufla nuestra dirección IP cuando usamos Internet, haciendo que nuestra ubicación geográfica real, sea invisible para todos.

Una conexión VPN también es segura contra ataques externos, debido a que solo nosotros podemos acceder a los datos en ese túnel encriptado, y nadie más puede hacerlo porque no tiene la clave. Además, una VPN nos permite acceder a contenido restringido regionalmente desde cualquier parte del mundo.

Por último, una empresa que disponga de una VPN corporativa, consigue una conexión totalmente segura a la intranet y al servidor de la empresa, incluso para los empleados que trabajan en una ubicación física fuera de la empresa, desde cualquier lugar, y con cualquier proveedor de internet.